Insatisfecho con el éxito de On the Road, Kerouac se retira de las resacas de whisky de San Francisco, bajando por la autopista 1 para buscar refugio a lo largo de la costa y el sinuoso cañón de Big Sur. El escritor se instala en la cabaña rústica de un amigo escondido en el bosque detrás del puente Bixby. La repentina fama y celebridad de la novela seminal de Kerouac lo convierte en un cínico, cansado y alienado por la cultura Beat que inspiró.
Big Sur es una exploración sinuosa de la costa central de California coloreada por la desilusión de Kerouac. Pasa sus días y noches deambulando sin descanso por el desierto vacío, explorando los arroyos, los acantilados y las playas rocosas. Con cada aventura, su mente se desliza más lejos de los rieles. Su estado mental vacilante se manifiesta en sus descripciones del paisaje, alternando entre horror y deleite. Consciente de su inestabilidad, está consternado al observar "todo un lío de pequeñas alegrías como esa que me asombraron cuando volví con horror para ver cómo habían cambiado y se habían vuelto siniestros". Big Sur es la paradoja de Kerouac, inquietantemente bella, inocente y malévola.
